Existen muchos mitos sobre las uñas esculpidas; la mayoría de ellos, totalmente erróneos.
Las uñas esculpidas constituyen la solución ideal para todas aquellas mujeres que desean tener manos espléndidas, ya que las uñas quedan perfectas: todas iguales, bien derechas, el esmalte no se salta, no se rompen, el agua no las ablanda ni las escama, adquieren más cuerpo y se corrigen los defectos de superficie.
Al trabajarse con acrílicos y geles de buena calidad, las uñas quedan completamente naturales, pasando desapercibidas; pueden hacerse largas o cortas, redondas o cuadradas, con o sin francesita, para obtener una mano prolija que siga el estilo de la clienta. Si la artesana que las realiza es buena y usa poco el torno, no existe dolor, otro de los mitos más extendidos.
Además, si se trabaja con buenos productos, las uñas base no se debilitan ni fortalecen, ya no se modifica la matriz de las mismas. Duran perfectas de 20 a 25 días, resistentes para realizar todo tipo de quehacer. En cuanto a los acabados, la francesita puede hacerse ya con el color incluído, para no tener que pintarlas; y si se busca algo diferente, puden colocarse strass, dijes o delinearse distintos dibujos y diseños.
Lo mismo vale para las uñas de los dedos de los pies, ya que el esculpido permite que queden perfectas, para poder lucir con calzado abierto. Asimismo, el esculpido de las uñas facilita terminar con el hábito de comérselas, ya que se esculpen sobre la uña en mal estado, permitiendo que la base crezca y mejore su aspecto.
Hoy por hoy, el esculpido constituye un accesorio casi indispensable para todo evento importante, más si de una boda se trata. Las novias hacen mucho incapié en el vestido, el maquillaje y el peinado, pero se olvidan de las manos, que también son protagonistas de ese día tan especial. Sosteniendo el ramo, al colocarse la alianza o firmando el acta del civil, las manos pasan a un primer plano, y no se pueden ocultar de la lente de la cámara y del fotógrafo. Y muchas veces, una simple manicuría no logra los resultados deseados.
Si las uñas son comidas y se desea esculpirlas, es importante concurrir a la especialista con 1 mes de antelación, ya que es necesario realizarles un service previo para que queden perfectas. Si las uñas son normales, basta con hacerlo una semana antes de la boda, para evitar sumar una tarea más a las actividades de último momento.
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